La tragedia de la cárcel de San Miguel, donde más de ochenta internos perdieron la vida, representa un golpe dramático para la sociedad chilena que, tal como dijo el presidente Sebastián Piñera, debe hacerse cargo de terminar con las condiciones inhumanas que causa el hacinamiento en los recintos penales del país.
Desde esa perspectiva, los gobernadores provinciales de la Quinta Región en conjunto con la Secretaría Regional Ministerial de Justicia ya han efectuado reuniones de coordinación para la implementación del Plan de Modernización del Sistema Penitenciario que el Gobierno inició el pasado 15 de octubre.
La realidad de la Quinta Región obliga a acelerar los proyectos que contemplan la construcción de dos nuevas cárceles, “una de las cuáles debiera quedar en la Provincia de San Antonio, cuya cárcel es conocida por sus condiciones de hacinamiento y para eso ya estamos evaluando posibles ubicaciones fuera del radio urbano”, explicó el gobernador Mauricio Araneda.
“Ejercer duras políticas públicas en materia de seguridad con el programa Chileseguro evidentemente no basta, por eso junto con entregar nuestras más sentidas condolencias a las familias de los reos fallecidos, llamamos a la calma de los internos en los recintos de la Quinta Región y estamos atentos a las medidas que al respecto determine el Gobierno para cada una de nuestros territorios provinciales” añadió la máxima autoridad de la provincia de San Antonio.
Por su parte, los gobernadores de Valparaíso, Quillota y Marga Marga, junto con lamentar lo sucedido, también manifestaron absoluta adhesión a las palabras del Presidente de la República, que haciendo frente a la emergencia comprometió medidas extraordinarias que se suman al plan anunciado en octubre pasado. “Valoramos profundamente el anuncio de nuestro presidente de implementar cárceles modulares mientras sigue el curso regular de las nuevas penitenciarías, ya que esos procesos no duran nunca menos de 3 años”.
Tan importante como sancionar a quienes cometen delito es garantizar la reinserción social y mejorar las actuales condiciones de las penitenciarias del país, que de manera tan dramática quedó en evidencia esta semana.